Torre Fuerte Montero vivió un año lleno de crecimiento, unidad y bendición. Desde la primera reunión del año, donde se compartió un hermoso tiempo de adoración, hasta eventos especiales como el Mes de las Parábolas, días de campo, y celebraciones para padres y madres, cada actividad reflejó el amor y la fidelidad de Dios. La participación en EXPONORTE permitió extender esperanza a la comunidad, mientras los bautismos en agua marcaron momentos de transformación y obediencia en la vida de muchos creyentes. El evangelismo en el Hogar de Ancianos y los encuentros de mujeres fueron espacios donde se compartió la Palabra y se fortalecieron corazones. Cada experiencia reafirmó el propósito de servir a Dios y ser luz en el mundo, viviendo con gratitud y dedicación.
